viernes, 21 de enero de 2011

Las palabras se las lleva el viento


Entre todo lo que vale en esta vida, las palabras se las lleva el viento, junto con las promesas vacías, junto con las memorias no compartidas, mis silencios, mis plegarias, todos se graba inconsciente acá adentró, todo se olvida allá arriba.


¿Sera que tengo una fascinación con las letras, pero una memoria que no me permite retenerlas? ¿Sera que por eso soy un escritor de imágenes, un conservador de instantes? Descubro algunos días que mi memoria es un álbum de fotografías digital, un poco de electricidad. Y así concibo, así creo, para que las palabras no se las lleve el viento, construyo con luz como castillos de arena, frágiles como mis sentimientos, fuertes como mis prejuicios y francos, siempre francos.
En esta foto me ayudo Carmina como modelo, quedo altamente agradecido por prestarme su única y misteriosa presencia, la sesión fue hecha en el acueducto de Querétaro el día que supuestamente los iban a envolver en tela.




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